Los hechos y/o personajes de esta obra son ficticios, cualquier similitud con la realidad es pura casualidad.

martes, 28 de agosto de 2012

8

Amanecen los chicos en la destruida casa de Macarena. La reja de la ventana principal desgarrada, los muebles dados vuelta, la pared de baldosas construída por Santiago. Hay sangre en el piso. Santiago se despierta. Mira a todos durmiendo, inclusive Paula y Nahuel. Haciendo el menor sonido posible se pone de pie y camina hasta la cocina, revisando en cada lugar. Ha amanecido recientemente, el frío azota toda la agujereada casa. Santiago no encuentra a nadie, busca unos cubrecamas y frazadas de la habitación de Macarena y los lleva hasta el living. Revisa a sus amigos: todos respiran a ritmo normal y ninguno sangra ni tiene hemorragias. Tapa a sus amigos del frío. Se fija en la puerta a la calle. Está bien cerrada. Cierra la persiana, quizá lo único que le queda sano a la ventana del living. Y se recuesta de nuevo con su grupo.

martes, 24 de julio de 2012

9

"Libéranos de todos esos conceptos malditos, de esa manía de tener que explicarlo todo."
Paulo Cohelo en A orillas del río Piedra me senté y lloré.


La explicación de las habilidades es extremadamente sencilla. Las personas tienen más necesidades básicas de las que habitualmente contamos. Una de las omitidas es la confianza, el contacto social positivo. Un grupo de amigos normal suele satisfacer solo parcialmente ésta necesidad. El suyo la satisfizo ampliamente y ello fue lo que favoreció la "evolución"...

miércoles, 16 de mayo de 2012

10

Un vehículo de la policía entra en el barrio. Las casillitas de guardia lo ven pasar. Dobla de la avenida, entra por una pequeña calle. Dos policías van en los asientos delanteros escuchando música, la música siempre los ayuda en momentos como éstos. Pese a haberlo hecho ya algunas veces, el nerviosismo vuelve a aparecer casi siempre. Como un pánico escénico no deseado. En cuanto llegan a la casa de rejas negras logran divisar que algo no anda muy bien. Las puntas superiores de la reja están algo deformadas, como si hubiesen recibido un golpe de calor de una máquina soldadora, o algo por el estilo. Frenan el auto, se miran, saben que están nerviosos pero tienen que hacerlo nuevamente. El que conduce, él no tiene tanto problema, su moral es mucho más flexible. El que va en el asiento del acompañante, aún no termina de convencerse de lo que hace, o por qué lo hace. Aún así se bajan ambos dos del auto, abren el baúl, sacan las dos escopetas, además de las pistolas que ya llevan, y se disponen a entrar. El más seguro entra primero, distendido, y con la escopeta al hombro. El otro ingresará por detrás de éste, con la escopeta apuntando hacia abajo, como tomándola con extrema cautela.
Tocan el timbre.

- ¡Policía! - Anuncian.

El policía inseguro mira a su compañero, como esperando una mirada tranquilizadora, pero no la encuentra, su compañero se distrae con las ventanas de la casa.
Nadie responde. Tocan de nuevo. Inmediatamente, en el piso superior, el gabinete de una computadora, con toda la información que tenía guardada, comienza a ser rociado con alcohol, siendo preparado para la ignición.

- Va a haber que forzar la entrada. - Dice el primer policía.

domingo, 29 de abril de 2012

;)

jueves, 12 de abril de 2012

Ħolm

  Todos sedados en la casa de Macarena. Tirados en filas. Duermen profundamente. La mañana se aproxima. La reja de la ventana principal de la casa ha quedado destruida. Al igual que el techo de chapa del garaje. Y la puerta mal cerrada con una montaña de concreto. Nadie vigila a los chicos dormidos.
 Cerca de ellos, en una de las baldosas del piso, el auricular de un comunicador ha quedado olvidado. Del otro extremo de este comunicador hay un micrófono y un equipo de distorsión de la voz. Y frente a éste, se encuentra un hombre mañatado.

miércoles, 4 de abril de 2012

Pelotón de fusilamiento

- ¡Contra la pared!

Nahuel, Mariana, Ana y Paula son llevados a apoyar las manos contra  aquellas manchas de humedad de la pared. El ambiente es tan desolado, pero no hay temor desde el momento en que hay resignación.
 Las manos enguantadas y violentas bajan precipitadamente los hombros de Mariana. Quien cae de rodillas.
 Uno a uno les irá haciendo lo mismo.
 El miedo de no saber cuándo dispararán, conjugado con el temor de tener la certeza de que lo harán, es una mezcla tribulante.

 Luego, en un acto silencioso y calmo, aquél que les ha hecho arrodillar se pondrá a un costado de la cadena de personas. Levanta el brazo extendido, con los dedos índice y mayor en alto. Cuatro de los que están detrás apuntan con sus armas. Los enguantados dedos presionan ligeramente el gatillo, para que quede listo.

Cuando finalmente la mano baja precipitadamente.


lunes, 12 de marzo de 2012

Invasión.

La casa realmente tenía más de una entrada factible: la puerta principal y la puerta trasera eran fácilmente forzables, al mismo tiempo, la ventana que daba hacia la calle poseía una reja que hacía algo de defensa, aunque las ventanas de la habitación de Macarena (ventana trasera) y de la habitación de sus padres (de más al fondo), no tenían protección alguna.

- Quiero que intercedan rápido. - Dijo una voz distorsionada tiempo atrás. - Sin ruidos de más, sin movimientos de más, sin dejar ninguna salida por donde puedan escaparse. Pero recuerden, no quiero ni una baja... en caso de quedarse sin dardos o de que se les sustraigan sus armas, utilicen la fuerza golpeándoles en puntos no vitales. Todos y cada uno de los que están allí dentro son de utilidad para el objetivo.

sábado, 3 de marzo de 2012

Aguafiestas

-Bueno, bueno, esperen chicos... a la 1... a las 2... y a las ...

Todos brindaron e hicieron fondo blanco, estaban parados en ronda, los vasos de aluminio de Macarena relucían a la tenue luz de su comedor.
 Algunos brindaron con Ron, otros con Vermouth, otros con aperitivos, David con Fernet, Mauro con Caña, Rafael con Vodka, Santiago con licor de Durazno

- ¡La puta!, ¡que vale la pena estar vivo!


domingo, 26 de febrero de 2012

Gaia

- Tranquilo Raf, larga historia...
- ¿Podemos pasar a tomar algo fresco? - Pidió David e hizo un ademán de estar acalorado. - La cuerina es lo peor que hay.
- Si, pasen, enseguida Mario les va a servir algo fresco... pero ¿Qué es este camión? y ¿Por qué la sangre en tu remera?
- Es sangre de Tadeo...
- ¡¡¿¿de Tadeo??!!! ¿¿que le pasó??
- bueno... es largo...
- Ustedes vengan y entren que me estoy muriendo. - Exige David.

viernes, 10 de febrero de 2012

Fuoco Ardiente

David coducía en pensativo silencio. Aún cargaban con al menos dos tercios de la droga que inicialmente tenía el camión. A su lado estaban Santiago, Natalia y Rolando.

 - Bueno! Al menos el doctor dejo claro que Tadeo está bien! - Dijo Rolando, algo más animado.
 - Si chabon... pero que vamos a hacer con este camion? - Dijo Natalia.
 - Es algo que to tambien me planteo - comento Santiago y miró a David.
 David los miró pero no en profundidad, sino como quien simplremente miora meditando, planificando. Sin dejar de prestar atenciíon delante.
 - Encima tiene nuestras huellas por todos lados, y la sangre de Tadeo.
 - Huy es verdad! - Rolando se apresuró a sacarse la remera y con ella se dispuso a limpiar la sangre de su amigo.
 - Esperá Rolo que todavia no sabemos que vamos a hacer... ¿Adónde estás yendo David?
 - A sacarnos de encima esto...