Los hechos y/o personajes de esta obra son ficticios, cualquier similitud con la realidad es pura casualidad.

lunes, 4 de julio de 2011

El riesgo: la resignación.

Capítulo 72

Jushhhhhglouglgou...

Rolando tira la cadena y se enjuaga las manos. Cierra con fuerza su mandíbula mientras se mira al espejo. Abre la puerta y sale.

- Sospecharán algo? El caso todavía está abierto. Creerán que fuí yo? - Piensa.- Tengo que disimular.

Llega al comedor con los otros.

- Solamente alguien tan friki como Rolo podría usar un traje tan feo como ese! - Dice David.

- Jajaja - Ríe nervioso Rolando. - Ese es el tipo del banco Nación?

- No era del banco Río?

- No, esos eran otros...

Se sientan a la mesa, está la merienda preparada y servida, los chicos comen mientras miran atentos al televisor.

- Huy me olvidé los cuchillos para untar...

- No te hagas drama, voy yo. - Dice Rolando sin levantarse. Un cajón de la cocina se abre y se levantan dos cuchillos que vuelan hasta la mesa, se cierra el cajón.

El columnista continúa la Nota:

- Claro que, aunque fue una noticia que se difundió bastante, por lo de la fecha y el traje estrafalario y todo lo demás, no encuentro ningún resgistro en el blog del noticiero que muestre un seguimiento del público. Claro que la mayoría de la gente dirá...

- Saquen esto. - Dice Rolando. - ¿No están los imaginadores?

- Cambien de canal... - Continúa el columnista. - Esto es aburrido, siempre pasa lo mismo... y si. Es así. Siempre pasa lo mismo, pero lo que yo me planteo es, ¿hasta cuando? ¿Cuántas veces se tiene que repetir una desgracia para que abramos los ojos? A mí no me termina de cerrar todavía, Lo que tenemos en claro es que un hombre, de unos 35 años, habría armado, junto con los guardias y con los tesoreros del banco, un plan que indicaba que éste hombre, Ulises Martínez, quien vivía cerca del banco, habría utilizado un traje negro con capucha. Quien es capturado por las cámaras de seguridad al momento de arrebatárle una escopeta al guardia...

- ¿Ulises Martínez??? - Pregunta Rolando.

- Según se cree, el hombre habría agarrado una mochila después de ésto y habría huido del lugar. Para repartirles luego el botín a sus cómplices. Pero claro, el dinero robado estaba marcado y la pista fue fácil de seguir, sobretodo si intentó comprar con un billete de cien pesos, una docena de sánguches de miga, justo en frente de la Plaza San Martín.

- Ah! hay que ser pelotudo para gastar la plata que ACABAS de robar, justo al frente del banco... - opina Santiago.

- Ay! Quien mierda se va a creer toda esta cosa! - Exclama Rolando.

- Inmediatamente - continúa el columnista. - se le da captura a Ulises y a los guardias, que serán enjuiciados por el Dr. Juan Gaona. Quien los mete en prisión y fin de la historia...

- Pero no era que había dicho algo de la independencia...? y que ...

- Sí! eso dijo! - Exclama Rolando. - Y ese Ulises?? Encima robó tres millones de pesos! no cien!

- Claro que uno se preguntaría, ¿Adónde fue a parar toda la demás plata? Y... el hombre, entre el desorden que tenía en la pieza en la que vivía, había escondido perfectamente el bolso azul con el dinero, que después encontraría la policía ayudada por algunos funcionarios del banco.

- Bolso azul???? - Piensa Rolando.

Santiago mira fijamente a Rolando. Él se gira y le devuelve la mirada, la mantiene, hasta que parpadea repetidas veces y aparta la vista. Santiago frunce el entrecejo.

- Le minten a todo el mundo... - Piensa Rolando.

El comentarista continúa:

- Claro que la crítica no va dirigida a que un caso haya quedado abierto o sin resolver, sino a un tipo de personas, que ven a la información de todos los días como algo descartable. Y que no actúan en consecuencia, la cantidad de muertos por accidentes es cada vez mayor pero todavía siguen existiendo los que dicen "a mí no me va a pasar". Los que viajan de a cuatro en una moto, llevando bebés en la parte delantera. ¿Tan difícil es reflexionar y actúar como uno lo cree correcto?... Creo que es algo que todos nos tendríamos que preguntar. - Se guarda la lapicera en el bolsillo de la camisa y pasan a comerciales.

- Pero eso es porque no se puede hacer nada! maldita sea... - Rolando habla con el televisor.

- Lo dejo ahí o lo cambio? - Pregunta Santiago.

- Ahora cambialo...

- Che al final las chicas le compraron el regalo a la Tati, no?

- Si, dijeron que iban a ir hoy...

Natalia por su parte se sonríe a sí misma, recordando el combate contra Rafael.

- A ver Rolo, dame un dedo. - Dice.

Rolando le entrega la mano y sigue viendo el televisor, espectante.
Natalia mira su dedo índice fijamente, la yema se empieza a poner roja...

- Au... - Dice Rolando sin volver la vista.

La yema del dedo se torna violeta y se le hacen unos pequeños tajos rojos.

- AH! carajo! - Grita y saca su mano. - Nati! - Mueve su dedo y se lo masajea.

- Perdón perdón perdón! - Exclama Natalia.

Microscópicas gotas de sangre brotan por los pequeños tajitos.

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Diego se despierta en una calle de tierra, descalzo, con dolor de cabeza y débil. La tarde ha caído, disminuye la visibilidad lentamente.

- Aaaahhhhwww... La puta madre... - Se estira y se masajea la frente.

Revisa sus bolsillos, nada. No hay celular, no hay reloj.

- De suerte que todavía tengo la remera y el pantalón. - Piensa mientras se para y se sacude.

Mira alrededor, sólo casas humildes y pequeñas, ninguna lámpara del alumbrado público se enciende...

- Puta madre.. - Empieza a caminar.

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Mauro está jugando a un videojuego en su computadora. Sólo en su casa. Con los auriculares puestos, escucha música y conversa con sus amigos.

- Dale, dale! pusheá boludo! rápido!

- Yo no estoy en mid te dije!

- Mierda...

- Ya voy yo...

- No, pero a vos te van a hacer...

Tump!

Mauro se quita los auriculares. Un ruido en la entrada de su casa...

hace silencio... buscando escuchar algo más...

- Seguro fue Jasper. - Piensa. - Que tiró algo...

...

Aguanta unos segundos más haciendo silencio...

TUMP! TUMP TUMP!

Golpes fuertes en la planta baja...

- ...Mierda... - Dice en voz baja.

Abre el único cajón sano del escritorio de la computadora.

TUMP! TUMP!

Los golpes siguen, suena a madera y metal.

Saca una botella de alcohol, abre el gabinete de su CPU, destapa la botella, está aun sin cortar el pico, desesperado, desenrosca la tapa y empieza a rociarlo sobre los circuitos y las placas... apretando con fuerza para producir un chorro fuerte.

TUMP! TUMP! TRUNK! TRAC!

- ...Mierda, mierda, mierda...

Capítulo anterior.__________Capítulo siguiente.

3 comentarios:

  1. mmm, se viene el relampago contra alguien, y le va a doler!! :D

    Echo

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  2. jajaja me encanta!!!!
    chee y yo me deberia habe dado cuenta no?? ¬¬ porqe bien qe te conozco ^^
    y como me rei cuando lei lo de "pushea boludo" xD

    (nati)



    te extraño rolooooooooooooooooo

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  3. AHHH !!! NOOO MAURO NUNCA HARIA ESOO!!! mauro nuuuunca quemaria su compuuu!!!

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