Los hechos y/o personajes de esta obra son ficticios, cualquier similitud con la realidad es pura casualidad.

viernes, 5 de junio de 2015

HR Transición (Cap 10)

Capítulo 10

Antes de que les narre cómo fue que me hice tan rico como quise, aprovecho para contarles un poco de mi vida sexual...

En el colegio al cual asisto hay una mina que esta... cómo decirlo?... RE BUENA.
Es magnética, posta, atrae a todo aquel que  mira, la voz es de una princesa y su cuerpo, Mamma mía! te hacen delirar cada noche y en cada ducha. El movimiento que hace con sus caderas y con su pecho, es grácil (ni siquiera tengo idea de lo que significa grácil, pero eso es ella. Seguramente. Calculo que es agraciado y suave como un Bambi.)



Bueno, la cosa es que estaba SÚPER buena la chabona, y... dadas las condiciones, dado el hecho de que yo podía viajar a través del jodido tiempo-espacio como se me cantara en las pelotas, me dije:
ESA CHICA VA A ESTAR CONMIGO.

Y así largué, Es curioso como teniendo el superpoder me animé a hacer cosas que de otra forma no hubiera hecho jamás, (pero claro, ahora tenía el poder del Control + Z permanentemente, si fuera un superheroe me llamaría "Ctrl + Z"...

No, es patético. Mejor algo así como "El magnífico y fascinante Ctrl + Z!"

(Imagen ilustrativa de lo que sería mi ControlZetaMóvil)


 No, sigue siendo una cagada, bueno, fue, me chupa un huevo ser un superheroe, la verdad. ¿Qué les estaba contando? 
Ah si, la Annie, que estaba recontrabuena. Si, se llama Annie, es de que en realidad su nombre es Anabella, luego le dijeron por síntesis "Ana" y como quedaba poco chic le pusieron "Annie", si tremenda boludez, pero bueno, las cosas como son.

La cosa fue así: Fui al cole y me metí en el baño bien temprano, creí que iba a estar solo, pero estaba el chabon de limpieza, esperé un rato afuera y se fue. Listo, mortal, un momento para mí sólo era todo lo que necesitaba.

Entré, apagué las luces, y bueno, el protocolo normal: Mirarme al espejo, agarrarme de la mesada del lavabo (¿se dice mesada?) cerrar los ojos y mirar hacia abajo. Esperar unos diez segundos y 

PUM!

Me clavaron un chasqui* en la nuca y eso inevitablemente me trajo de vuelta al mundo. Me dí vuelta, era Aron (No me pregunten por qué tenía ese apodo tan horrible) Lo mire seriamente y él y su séquito de doctorados en pelotudeo y dependencia social se largaron a reír a carcajadas, sin más me retiré del baño.

Caminé finalmente hacia el aula, puteando a Aron y a sus idiotas esbirros, pero optimista para con lo que podría llegar a darse con Annie. Me acomodé el cuello de la camisa, me aseguré de estar presentable. Tenía que ser un león, un macho alfa indiscutido. 

Me olfatee un poco antes de entrar, no encontré ningún olor, ni malo ni bueno, ni rico ni feo, inmediatamente tiré mi mochila al piso del pasillo y la abrí en el bolsillo en el que llevo ese kit de emergencia que todos necesitamos, saqué un desodorante y me rocié salvajemente con él hasta el punto tal de toser por la nube de aroma artificial en la que me había encerrado. Entre finalmente al aula, medio intoxicado, tosiendo todavía un poco y, muy a mi pesar, dejando caer un montón de cosas de mi mochila que había dejado abierta.

Entré como un idiota total, básicamente.

En ese momento la vi a Annie, se había venido más linda que nunca, o que siempre, no sé, el tiempo solía comportarse como una tortuga cuando empezaba a verla, el bullicio del mundo se enmudecía, el pelo, el pelo de las chicas es como aaaaaa, hermoso, divino, tremendo, dominante.

Y en ese momento pienso: Ya está es ahora cuando me tengo que jugar y encarar. Empiezo a caminar hacia ella con total decisión, pero doy dos pasos y recién ahí noto que la profe ya estaba en el aula y ya estaba escribiendo, y diciendo, algo. En ese momento el sonido vuelve a retumbarme en los tímpanos, pero no importa, no puedo tirarme para atrás ahora, ya estoy caminando, sigo avanzando mientras la tonalidad de mi cara se va volviendo cada vez más rojiza y mientras me voy dando cuenta de que cerca de ella no hay ningún asiento vacío como para un "escape de emergencia" por si llego a no atreverme a hablarle. 

Pero ¿Por qué no le hablaría? ¿Qué es lo que me podría bloquear? Soy imparable, me digo a mí mismo, soy un León. Tiro la mochila hacia un costado vacío y llego justo a estar parado al lado de ella. Todas sus amigas me miran de reojo y me ven raro. Me freno exactamente al lado de ella, mirándola fijamente y por alguna razón que sólo Dios conoce levanto la mano con el puño cerrado y el dedo índice hacia arriba (sí, con la misma postura que tendría una madre al darle un sermón a su hijo) Lleno los pulmones de aire listo para hacer la declaración de amor más grande de la historia, y en ese momento ella levanta la vista y me mira directamente a mí.

- Bleu ga-tris...!  Digo... Me preesttsssnnoo, perá, esperá. ¡Esperá por favor!

En ese momento el curso entero estalla en risas. Sí estimado señor/a lector/a, si la cancha ya estaba embarrada, yo acabo de clavar un gol en contra pero de chilenita.

- Dame un tiempo. no, no, espera, olvídate de todo ésto. Hace de cuenta que no dije nada - Le digo.
- ¿Eh? ¿Qué? - Me responde ella.

En ese momento me frustro y deseo con todas mis fuerzas salir corriendo de ese lugar...

Y lo hago. La profe ya directamente me mira con algo de miedo incluso.  Claramente estoy actuando como un jodido enfermo. Corro hacia el baño y entro, me miro en el espejo y lo pienso dos veces. Si vuelvo, nada habrá pasado, nada de nada para los demás, pero para mí si. Tengo la capacidad de obtener Exp sin perder ningún turno. (Sí, pienso muchas veces en términos de juegos de rol / Videojuegos.) Eso quiere decir que si vuelvo ahora al punto inicial, estoy perdiendo la oportunidad de hacerlo en esta realidad. Ella no me rechazó, y eso que la cagué en grande. Me miro a mí mismo.

¡Es verdad! grito mientras golpeo la mesada del lavabo. Tengo que aprender a levantarme de cada tropiezo, incluso aunque tropiece cada dos pasos!

Vuelvo al aula con total decisión, entro como la persona civilizada que soy, mientras recojo la mochila y los útiles que se me cayeron. Me siento en mi lugar y, fuera de mirarme como a un bicho raro por al menos dos minutos, la gente comienza a actuar con normalidad. Ya lo saben, el curso entero, incluyendo a la profe ya lo saben. Ya saben que Annie me puede...

Mientras apoyo la frente sobre mis brazos cruzados sobre el pupitre pienso, ¿cómo se encara a una mina?

(*) "chasqui" se le llama a un cacheteo con el reverso de la mano, generalmente acestado en la nuca y con intención de burla.

Capítulo anterior.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¿Qué te pareció este capítulo?